Un año más, diversas empresas, colegios y asociaciones han confiado en la Fundación Federico Ozanam como destinataria de sus campañas solidarias de recogida de juguetes. Gracias a estas iniciativas, cientos de artículos nuevos y en buen estado llegarán a familias en situación de vulnerabilidad y a centros donde la Fundación lleva a cabo sus diferentes proyectos infantiles, llevando alegría y esperanza a quienes más lo necesitan.
Es el caso de los juguetes recogidos en la campaña organizada por el Estadio Miralbueno El Olivar bajo el lema “Un juguete, una sonrisa”, en colaboración con la empresa TCG Factory, distribuidor de juegos de mesa, funkos y cartas coleccionables. En el acto de entrega, Fernando Galdámez, presidente de la Fundación Federico Ozanam, recibió las donaciones de la mano de Francisco José Pablo, presidente de El Olivar, acompañado por Natividad Velázquez, delegada del área social de la entidad, y Gonzalo Pastor, director editorial de TCG Factory.
Otro acto especial tuvo lugar en el Colegio Compañía de María donde los propios niños y niñas de 3º de Educación Infantil hicieron entrega de los juguetes recogidos en la campaña solidaria organizada por la AMPA y el centro educativo. Además, aprovechando esta iniciativa, el alumnado pudo conocer la labor que realiza la Fundación Federico Ozanam en la Comunidad Autónoma de Aragón.
Otras empresas que han demostrado su compromiso organizando campañas solidarias en beneficio de los proyectos de la Fundación son Grupo JAB, Telergon, Audi Center Zaragoza, Atlas Proyectos Informáticos, Bilsteingroup y Dana Automoción. Este año, además, se sumó el Stadium Venecia, ampliando la red de solidaridad. Asimismo, los colegios Sagrado Corazón y Sagrada Familia también han querido contribuir, organizando recogidas de alimentos destinadas a diversos centros de la Fundación.
Desde la Fundación Federico Ozanam queremos agradecer profundamente cada una de estas iniciativas, tanto en estas fechas navideñas como a lo largo de todo el año y, especialmente, para la celebración de cada edición del Rastrillo Aragón.
La implicación de empresas, asociaciones y particulares refuerza el sentido de comunidad y nos recuerda que, juntos, podemos marcar una diferencia real en la vida de familias en situación de vulnerabilidad.