En el Albergue Municipal se celebraron el 16 de junio, dos conciertos dentro del VIII Festival Internacional de Música de Cámara de Musethica que nos dejaron a todos conmovidos. A los asistentes que residen allí porque es un regalo inesperado, un concierto de música de cámara. A los trabajadores, porque la novedad rompe la rutina y la música genera emociones diversas. Y a los profesionales y usuarios del programa Sinhogarismo de la Fundación Federico Ozanam, por la emoción que supone ver a las personas con las que trabajamos todos los días emocionadas y agradecidas por haberles proporcionado un momento de disfrute musical tan impactante. Seguramente, porque como dijo Robert Browning: “El que escucha música, siente que su soledad, de repente, se puebla”. “Es lo mejor que me habéis podido regalar, me gusta mucho esta música” decía un emocionado Donato del programa Housing First que gestiona la Fundación Federico Ozanam, conjuntamente con el Albergue Municipal.
“Dos violines… uno es más grave que el otro” decía un residente del Albergue Municipal. Fue músico y explicaba con detalle en un diálogo con los músicos que el arco de los instrumentos de cuerda está hecho con pelo de caballo porque el pelo de caballo tiene una forma muy característica con estrías que hace vibrar las cuerdas de los instrumentos de cuerda. El diálogo final entre los músicos y los presentes en los conciertos, ha tenido momentos muy entrañables.Musethica
Musethica se crea en la ciudad de Zaragoza teniendo como co-fundadores al violista Avri Levitan y la profesora Carmen Marcuello en el año 2012. Desde entonces, se ha expandido con sedes en Alemania, Israel, y Suecia, y colabora con Austria, China, Francia, Holanda y Finlandia. Tras más de 1700 conciertos en 8 países. Musethica ayuda a los músicos a comprender que ser un músico excelente significa tocar para todos y tener la capacidad de convencer a cualquier tipo de público de la belleza de la música. Sin duda fue también un momento mágico para Jonathan Brown, Josef, Sonja, Siqi Yu, y Antonio Gervilla, del quinteto internacional de cuerdas llegado desde Israel, Alemania o China gracias a la Asociación Musethica. Nos deleitaron con piezas del compositor Mendelssohn y Falla, entre otros, y seguro que tardarán en olvidar las miradas emocionadas y agradecidas de las personas asistentes. Porque en esencia…la música te lleva a ese mundo mágico en donde eres libre de ser y sentir.
(Texto adaptado de la reseña de Antonio Jiménez Miguel)